Una de las consultas más frecuentes en el comienzo del otoño son las infecciones de las vías respiratorias. Muchos pacientes padecen de este episodio en forma recurrente; es importante resaltar que las infecciones no solo pueden ser de causa bacteriana, sino también virales y parasitarias.
La piel del aparato respiratorio, a la que la llamamos mucosa está expuesta a gérmenes causantes de esta sintomatología, que en muchos casos puede ser grave. Por ello, es necesario mantener y controlar el sistema inmune para que sea capaz de defendernos.
Es común que los pacientes piensen que toda infección respiratoria es de causa bacteriana por lo cual lleva al uso de antibióticos, o al mal uso de estos sin indicación médica, generando efectos adversos y posteriormente generar resistencia bacteriana.
Al comienzo de estas estaciones invernales, se incrementan las consultas médicas en especial a neumología por infecciones respiratorias (rinitis, sinusitis, bronquitis, neumonía). Si bien estos padecimientos pueden afectar a toda la población, se necesita prestar mayor atención en los grupos de riesgo como niños menores de 5 años y personas mayores de 65 años a lo que llamamos grupos vulnerables.
La forma más común de transmisión es de persona a persona, a través de las secreciones respiratorias que los pacientes infectados expulsan al toser, hablar o estornudar. Por ello aconsejamos extremar los mecanismos de prevención y de higiene personal.
Medidas de prevención
- Lavarse las manos de manera frecuente antes y después de ir al baño y antes de comer
- No fumar, porque el tabaquismo nos hace más susceptibles a estas enfermedades.
- Evitar el contacto con personas que estén enfermas.
- Usar un pañuelo o cubrirse en la parte interna del codo para estornudar, evitando el contacto con la boca y la nariz.
- Sostener la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de edad.
- Ventilar los ambientes por lo menos cada dos horas.
- Mantener actualizado el carnet de vacunas acorde a edad.
- Ventilar los lugares cerrados y evitar si es necesario, lugares con concurrencia masiva de personas o con posibilidad de personas enfermas, guardias de centros de salud.
Por eso siempre ante la duda, comienzo de síntomas o persistencia de los mismos consulta con tu neumonólogo.
